Ya has llegado?

Pues nada, ahora toca leer un ratín. No te aburras mucho. Al fin y al cabo, esto es una página personal, en la que tal vez encuentres puntos comunes contigo y te rías al verlos reflejados, o simplemente encontrar la forma de matar parte de tu tiempo libre...En cualquier caso, gracias por estar aquí.

lunes, 10 de diciembre de 2007

Un día en la ópera


Pues sí. Hay pequeñas cosas en mi vida que van viéndose realizadas. Por fin he ido a la ópera al Real. Algo desilusionante el recinto después de haber visto, París, Praga y Budapest (a falta de la Scala de Milán y algún otro), con poca historia entre sus paredes, y demasiados abrigos de piel en los guardarropa.

Pero ilusiona. A los que nos gusta la música, es una oportunidad de escuchar a gentes con voces prodigiosas y no poder evitar ese cosquilleo que hace que se te ponga la piel de gallina, escuchando coros, viendo como canta el tío gordo o la gorda de las tetas (es curioso que siempre estén metidos en kilos), que incluso tumbada y con ese traje de época rococó apretao, hace que de su garganta o estómago (a saber) emergan esos gorgorismos imposibles para casi todos los mortales...

Una pega. No deberían hacer la traducción simultánea. El libreto es facilón, no hay demasiado texto, son frases absurdas, mil veces repetidas en distintos tonos y con colores de voz diferentes,..., pero frases tontas al fin y al cabo. Tendría más encanto, no tener ni pajolera idea de lo que se están diciendo, que la música y las voces te envuelva en una historia que creemos nosotros, cada uno la suya propia. Yo tuve mi momento de desconexión, sentada en esa silla (los de 16 leuros no tenemos derecho ni a butaca, pero teníamos luces...) de lado, que sólo me permitía ver la mitad del escenario e imaginé un final alternativo que seguro hubiese arrancado más aplausos al final. Ya sabéis. La gorda de las tetas, muere en circunstancias extrañas...Probablemente, cuando su doncella le apretaba el corsé y ella, mientras, comía pasteles...Qué pérfida!!!!

4 comentarios:

colombo dijo...

Qué nivel de blog... Yo nunca he ido a la ópera y me gustaría. ¿Sería demasiado pedir que me invitaras algún día? Por si cuela.

Agüi dijo...

Ah, pero ésto no trata de que el chico invita a la chica para impresionarla...? Como cambia el cuento.
Cuando pongan la Traviata, o Rigoletto, o Carmen, o Nabucco, o Tosca, Otelo, o Romeo y Julieta, o la Boheme..., hablamos, ok?
1Besote.

Sombra dijo...

Una pregunta... ¿La silla era de esas de tijera o al menos era acolchada?

Agüi dijo...

Hola papá sombrita!!! Para no mentir, diré que la silla era casi de reinona, muy mullidita y cómoda, el problema es que, sólo aproechaba el filo de la misma, para conseguir ver algo desde mi lateral...
Una pena, que merece (en serio).